lunes, julio 25, 2005

Rigor

Varios días transcurrieron. Un viaje a otra ciudad. Horas de trabajo.
Alguien murió anoche. Muchos murieron anoche.
El silencio es una forma de la muerte. La exclusión es una forma de la muerte. La vida se está transformando en un campo de batalla, igual que la poesía. Igual que la historia de nuestra literatura, escribiéndose más que nunca.
Cada tanto recuerdo una escena de la miniserie "Paton", cuando Georges Scott, en su personaje, llega a un campo de batalla devastado, cubierto de cadáveres y sangre, y dice, contemplando el paisaje, aspirando profundamente el aire hediondo: "Me gusta esto. Amo esto, desesperadamente."
¿Será eso amar la vida?
A veces las películas de guerra despiertan la fuerza que prevalece, oscuramente, en la conciencia de nuestra propia fragilidad. No el thánatos sino el demoledor esmero de continuar viviendo, a pesar de todo.

1 comentario:

dcllanto dijo...

uauuauauaua, que frase, amo esto desesperadamente. eso se aplica a tantas partes de mi vida.
gracias.